Juan Pablo Marca es polítólogo y analista político. También contribuye regularmente con la Fanesca Política. Su más reciente trabajo titulado “Octubre y noviembre de 2019 en Bolivia: Una lectura desde Santa Cruz“, es parte de la compilación titulada “Whipalas, luchas y la nueva nación” (2020).
La Fanesca Política entrevistó al politólogo Juan Pablo Marca para conocer su opinión sobre las recientes elecciones en Bolivia que dieron como triunfador al Movimiento al Socialismo (MAS).
La Fanesca Política (FP): ¿Cómo evalúa el proceso electoral del 2020 en Bolivia?
Juan Pablo Marca (JPM): Como una elección similar a la del 2005 que dejó muy sorprendido a todos, incluido a los mismos militantes del MAS por su resultados finales que dieron una victoria contundente a un partido que dejo el gobierno de una manera muy particular. Como un proceso electoral que en sus inicios empezó con muchos problemas, por el prorroguismo del gobierno de Jeanine Añez; la gestión de la pandemia del Covid-19, que afectó a la ciudadanía en general; y la permanente vulneración de derechos a los sectores críticos al gobierno que posteriormente tuvo que afrontar la crisis de las movilizaciones de agosto que exigió la convocatoria a elecciones. En síntesis, se puede evaluar el proceso electoral como positivo más allá de algunas cuestiones que se debe mejorar, al final mostró la vocación democrática del país por la jornada electoral de ese día.
FP: Tras la renuncia de Evo Morales el 2019, muchos analistas auguraban el fin del Movimiento Al Socialismo (MAS) ¿Por qué el MAS obtuvo el 55% de los votos en estas elecciones?
JPM: Por varios elementos. En lo referente al gobierno de transición. Primero, la pésima gestión del gobierno de Jeanine Añez en esta pandemia. Segundo, los hechos de corrupción (por ejemplo, el caso de los respiradores entre otros). Tercero, las secuelas de la masacre de Senkata y Sacaba. Cuarto, el ministro Murillo y su discurso de persecución política al MAS.
En lo que se refiere al MAS. Primero, la fórmula de la candidatura Luis Arce y David Choquehunaca mostró de mejor manera lo que el país estaba buscando en términos económicos, Arce mostró la estabilidad económica para el país y Choquehuanca la garantía de que un indígena estará a la cabeza del gobierno como vicepresidente. Segundo, porque el discurso de lo nacional-popular indígena campesino sigue vigente en el país y el MAS es que mejor lo representa.
En lo que se refiere a la oposición. Primero, que Carlos Mesa no pudo llegar y convencer al electorado popular indígena y periurbano de las ciudades. Segundo, que Luis Fernando Camacho concentrara parte del voto útil, que el año pasado era para Mesa, y que disperse el voto de la oposición, aunque juntos no lograrían incluso superar el 55% de los votos del MAS.
FP: El excandidato por Comunidad Ciudadana afirmó hace unos años, y retomó durante su campaña, la idea de que hablar de Derechas e Izquierdas eran categorías “simplistas” y que estaban “obsoletas” ¿Cree que los resultados de la votación apoyan o desmienten su hipótesis?
JPM: En el imaginario de la gente que vota por el MAS se cree que el partido es de izquierda y socialista y muchos electores de la oposición creen que el MAS es izquierda y que es un partido socialista. Para los militantes del MAS, los partidos contrarios como CC y Creemos son de derecha. En parte, estas elecciones mostraron que estas categorías siguen vigentes en términos discursivos, aunque en el fondo muchos de las propuestas de uno u otro partido puedan ser catalogados al mismo tiempo como de derecha e izquierda.
FP: Las anteriores elecciones y las actuales han visto el surgimiento de un electorado conservador, que utiliza la religión como orientador ético de la política ¿Son estos grupos fenómenos coyunturales o son actores que se consolidarán en los siguientes años?
JPM: Son grupos que responden a un giro internacional donde diferentes actores del campo religioso ingresan al campo político-partidario, con el cual los sectores conservadores y ultraconservadores se sienten identificandos ante la crisis de los partidos tradicionales de ideología liberal. Estos se consolidarán evidentemente en los próximos años.
FP: ¿Cuáles son los principales retos del nuevo gobierno?
JPM: No repetir los errores de los dos anteriores gobiernos, trabajar por una gestión con menos corrupción, sin autoritarismo, en diálogo con los actores de la oposición. Trabajar en un nuevo sistema judicial. Trabajar en el cambio paulatino de la matriz económica productiva, el respeto de los derechos de la naturaleza, la madre tierra, una economía sostenible y los pueblos indigenas del país.
FP: ¿Cuál es el rol de Evo Morales en el proceso de renovación del MAS?
JPM: La formación de nuevos cuadros políticos del MAS para los próximos años y llevar al partido a una introspección y una autocrítica interna sobre los errores que tuvo el MAS en los catorce años de gobierno. Debe dar la oportunidad e intervenir lo menos posible en la gestión del nuevo gobierno del MAS.
FP: ¿Tendrá algún efecto la victoria del MAS en una posible recomposición de un bloque “progresista” en América Latina? ¿Cuáles serían los obstáculos?
JPM: Muy probablemente que sí, dependiendo como transcurre el proceso constituyente en Chile, las elecciones en Ecuador y en otros países donde se vienen sus elecciones. Uno de los obstáculos seria la mala gestión que tengan los gobiernos identificados como progresistas y que estos se conviertan en gobierno autoritarios y no respeten sus constituciones.
Kommentare